jueves, 24 de febrero de 2011

¿Existe Dios?: ¿Cuántos son?


142fc496eac1104b24ae30fdcb1cffa1
Seguro estoy que más de uno se va a seguir escandalizando por la pregunta que se hace en el post. Pero antesde dar una opinión les invito a leer este libro:

Una pregunta que a muchos no les va a Gustar: ¿Existe Dios?

¿Existe Dios?





¿Existe Dios?: Hans Küng

Archivo: .zip | tamaño: 51 MB | Idioma: Spanish | Categoría: Teología_Hermenéutica


¿Existe Dios? Y por extensión: ¿Quién es Dios? A ambas preguntas quiere este libro dar una respuesta, y fundamentarla.
Quiere tomar en serio el interrogante, pero no quedarse ahí. ¿Sí a Dios? Hace tiempo que para muchos cristianos ya no es evidente. ¿No a Dios? Para muchos no creyentes tampoco lo es. ¿Sí o no? Muchos, entre creer y no creer, están perplejos, indecisos, escépticos. Dudan de su fe, pero también dudan de su duda. Otros muchos están orgullosos de sus propias dudas. Pero el anhelo de certeza permanece. ¿Certeza? Sean católicos, protestantes u ortodoxos, sean cristianos o judíos, creyentes o ateos, la discusión recorre a lo largo y a lo ancho las viejas confesiones como las nuevas ideologías.


Verdaderos motivos hay para preguntarse: ¿No está el cristianismo en las últimas? ¿No se ha terminado la fe en Dios? ¿Tiene aún futuro la religión? ¿No hay moral también sin religión? ¿No basta la ciencia? ¿No se ha generado la religión de la magia? ¿No vuelve a desvanecerse con el proceso de la evolución? ¿No es Dios originariamente proyección del hombre (Feuerbach), opio del pueblo (Marx), resentimiento de frustrados (Nietzsche), ilusión de infantiloides (Freud)? ¿No está el ateísmo comprobado y no es el nihilismo irrefutable? ¿No han renunciado incluso los teólogos a las pruebas de la existencia de Dios? ¿O acaso se debe creer sin razones? ¿Creer sencillamente? ¿No se puede dudar de todo, excepto tal vez de la matemática y de aquello que se puede observar, sopesar y medir? ¿No habrá de ser la certeza matemática el ideal, o es que no hay base alguna de certeza?
Y aun cuando Dios existiera: ¿Sería personal o impersonal? ¿No resultaría ingenuidad lo primero y abstracción lo segundo? ¿O tal vez habría que preferir la sabiduría del Oriente? ¿El callar del budismo ante el absoluto sin nombre? ¿No son todas las religiones en definitiva iguales? ¿No sería intelectualmente más honesto el Dios de los filósofos? ¿Por qué ha de ser mejor el Dios de la Biblia? ¿Dios creador del mundo y consumador universal?
¿Qué podemos saber del principio y del fin? ¿Y, encima, el Dios cristiano: Padre, Hijo y Espíritu Santo? ¿Hay que creer todo eso? ¿Por qué, pues, creer en Dios? ¿Por qué no sencillamente en los hombres, en la sociedad, en el mundo? ¿Por qué creer en Dios y no en los valores humanos sin más: la libertad, la fraternidad, el amor? ¿Por qué también, además de confianza en sí mismo, confianza en Dios; además de trabajo, oración; además de política, religión; además de la razón, la Biblia; además del más acá, el más allá? ¿Qué significa en absoluto la fe en Dios? Y ¿qué puede significar la fe en Dios hoy?
 
Un cura y matemático polaco se ha embolsado el premio académico mejor dotado del mundo por un estudio que supuestamente muestra cómo las matemáticas pueden ofrecer pruebas indirectas de la existencia de Dios, según The Times. El religioso es el profesor Michael Heller, de 72 años, un filósofo especializado en matemáticas y metafísica, y ayer recibió los 1.069.000 euros del galardón, concedido por la Fundación Templeton en Nueva York. Las teorías de Heller no se centran tanto en ofrecer pruebas de la existencia de Dios como en suscitar dudas acerca de la realidad. Su especialidad son las fórmulas complejas que son capaces de explicar cualquier cosa, incluso el azar, a través del cálculo matemático. Heller es profesor en la facultad de filosofía en la Academia pontificia de teología de Cracovia (Polonia) y fue amigo del papa Juan Pablo II. La investigación de Heller “ha ampliado el horizonte metafísico de la ciencia”, según fuentes de la Fundación Templeton, que desde hace 35 años concede el premio al Progreso hacia la investigación o desarrollo de realidades espirituales. La cantidad del premio se ajusta anualmente para seguir siendo mayor que la del Premio Nobel, concedido por la Fundación Nobel. Un premio muy controvertido La Fundación Templeton ha sido criticada por su supuesta proximidad a la ideología conservadora y por defender la teoría del diseño inteligente para explicar la evolución. Una de las voces más críticas con la Fundación Templeton es la del biólogo evolucionista británico Richard Dawkins, autor de El espejismo de Dios, ensayo en el que proporciona argumentos científicos para desarmar cualquier forma de religión. Dawkins describe el premio como “una suma de dinero muy grande… que se concede normalmente a un científico dispuesto a decir algo bueno sobre la religión”. La causa de todas las causas No han trascendido los detalles de la argumentación de Heller, que ha emitido un comunicado en el que reflexiona acerca de la causalidad. “si preguntamos sobre la causa del universo deberíamos preguntar sobre la causa de las leyes matemáticas. Al hacerlo nos situamos en el gran plan maestro de Dios al pensar el Universo, ante la pregunta sobre la causalidad definitiva: por qué existe algo en vez de no existir nada?”, señala Heller. “Al preguntarlo, no estamos preguntando sobre una causa como otras causas. Preguntamos sobre la raíz de todas las causas posibles”, añade. “La ciencia no es sino un esfuerzo colectivo de la mente humana para leer la mente de Dios desde las preguntas de las cuales nosotros y el mundo parecemos estar hechos”.

No tratemos de engañarnos: Hoy más que nunca el ateísmo pide a la fe en Dios una explicación. Cada vez más confinada a la defensiva en el curso de la Edad Moderna, esta fe se ha vuelto hoy muda, en pocos al principio, pero el número no deja de crecer. El ateísmo de masas es un fenómeno de tiempos recientes, un fenómeno de nuestro tiempo. Las preguntas son insoslayables:
¿Cómo se ha podido llegar tan lejos? ¿Cuáles son las causas? ¿Dónde estalló la crisis?
En esta problemática, tan ardua como fascinante, entran en juego lo mismo la Revolución francesa que la teoría de la relatividad, las ciencias naturales que la política, la teoría de la ciencia que el psicoanálisis, la historia de las religiones que la crítica de la religión: ¿hay realmente algo que quede fuera de juego? Pero, ¿cómo dar a todo respuesta a un tiempo, siendo tan inabarcable el material que ha acumulado el caudal de la Edad Moderna? ¿Son tantos los interrogantes y problemas que para obtener respuesta convincente deberían ser resueltos simultáneamente? Aquí puede estar la razón de la amplitud de este libro.

DESCARGAR>>>

No hay comentarios:

https://story.ad/site/file_download/smartpublicity1467919561neTNIrOs.html